A mediados de la década de 1950 un adolescente llamado Gastón Escudero Jara comenzaba a trabajar en una carnicería. Fue el inicio de una tradición que hoy continúa su primogénito junto a ciento ochenta colaboradores que laboran en ocho tiendas agrupadas bajo tres marcas (Carnes Escudero, Carnes Mulchén y Campero) y una fábrica de cecinas.